200 Años de Independencia

Hoy, 10 de Agosto de 2009 son 200 años del Primer Grito de Independencia Ecuatoriano.

El 9 de agosto los quiteños, conformados por nobles criollos, pensadores, militares bajo la égida de Juan Pío Montúfar, Marqués de Selva Alegre y Juan de Dios Morales.

Se reunieron en la sala de la resistencia de doña Manuela Cañizares, en la casa de El Sagrario, junto a la Catedral Metropolitana de Quito, que esta distinguida matrona la arrendaba.

Ellos planificaron la formación de una junta de gobierno, fingiendo tutelaje al monarca español. En esta fecha ellos no proponían la independencia sino que hablaban de una República Monárquica o una Monarquía Republicana, manteniendo y la fidelidad hacia el rey Carlos IV, quien se encontraba depuesto y prisionero por Napoleón Bonaparte, quién había colocado en el trono de España a su hermano José Bonaparte.

Al estar encarcelado el Rey y ocupada España por los franceses, las Colonias quedaban sin autoridad, debiendo asumir su propio gobierno, en espera de que la situación se definiera. Esto era como estrategia para ganar tiempo para reforzar su posición.

En la madrugada del 10 de agosto los revolucionarios tomaron por sorpresa las colonialistas y sitiaron la casa de gobierno, obligando al Conde Ruiz de Castilla, presidente de la Real Audiencia de Quito a capitular.

16 de Agosto de 1809 por los diputados de los diversos sectores de Quito fue firmada el ACTA DE INDEPENDENCIA de Quito.

Al poco tiempo, retornó la normalidad en España, entonces fue desconocido el gobierno de facto de la Real Audiencia de Quito, quiénes cedieron el poder nuevamente al Ruiz de Castilla. El prometió no tomar represalias, pero no ha cumplido sus promesas, persiguió y encarceló a los cabecillas del grupo, obligando a los otros miembros a huir y esconderse.

El único que no fue encarcelado ni perseguido fue Pío Montúfar, por su calidad de noble criollo le debía lealtad al rey Carlos IV, sin embargo ayudó y ocultó a muchos de sus compañeros perseguidos.
El 2 de agosto de 1810, se produjo un intento de liberar a los prisioneros, por parte de jesuitas y la población simpatizantes del movimiento, atacaron los calabozos aprovechando un cambio de guardia. Esto se produjo un enfrentamiento entre las dos partes.

Aunque Ruiz de Castilla ha ordenado a su gente proteger a los prisioneros, hasta el juicio formal, los miembros de la guardia real guardaban rencores y odio hacia los prisioneros, por lo que se dirigieron a los calabozos y sin previo aviso los asesinaron. Este hecho se conoce en Ecuador como la «matanza de los patriotas del 10 de agosto».